Lugar desconocido...(priv. Sora)

Ese día Sora se había tomado el día libre pues ya estaba agotado de tanto trabajo en alta mar y no hubo problema alguno en que saliera del barco, había preferido caminar en tierra firme que nadar con su forma de leviatán. Camino cerca de una finca rustica donde el pasto cubría la mitad de sus piernas según el estaba buscando un lugar donde tomar una siesta cuando logro escuchar una voz femenina, de forma inmediata camino hasta el lugar donde se escucho llevándose una sorpresa, entre el pasto estaba una hermosa joven de cabellos rosas pero al seguirla observado fijamente noto que estaba lastimada.

-¿necesitas ayuda?-

Normalmente el joven era una persona ruda y poco considerada pero al notar el estado en que se encontraba la misma no era tan frio para no brindarle ayuda a una persona que la necesitaba.

Se acerco a la chica inclinándose y tomando entre sus manos el tobillo de ella, lo observo por un momento mientras callaba.

-no es nada grave solo requiere cuidados-

Rasgo un trozo de tela de su camiseta y lo enrollo alrededor de la zona herida haciendo presión para calmar un poco el sangrado sin embargo necesitaban de un kit medico o de lo contrario la herida podia llegar a infectarse pero a juzgar por el sitio no debía haber ningún hospital cerca lo que complicaba mas la situación.

-escucha… soy Hirano Sora y necesito que confíes en mi, tengo que llevarte a mi embarcación para atender tu herida ¿entiendes?-

Sus intenciones eran puras, el ser no conocía los sentimientos impuros de los demás , es mas desconocía muchos sentimientos era un completo novato.

Noto ese leve rubor en las mejillas de la chica de cabellos rosas pero no entendía que podia significar, lo había visto en otras ocasiones solo que no prestaba mucha atención era de ese tipo de personas que solo entendían cuando eran directos con el.

-Aiko, entendido tratare de no olvidarlo-

A pesar que no sonreía ni nada por el estilo, estaba en cierto modo feliz que le brindara su confianza a una persona que apenas miraba por primera vez. La chica no lograba levantarse por si misma entonces el procedió a ayudarla cargándola en sus brazos y tomando camino lejos de aquel lugar tan rustico.

-solo aguanta un poco mas, no estamos tan lejos-

En realidad no estaban tan cerca pero no quería que ella entrara en pánico por la duración de la caminata.

Sintió como la chica se arre costaba a su pecho llegando a provocarle una extraña sensación que no podía describir ni tampoco entender, en ocasiones se frustraba por no poder entenderse a si mismo, suspiro y continuo su travesía.

-¿de que huyes?-

Tal vez la pregunta era indiscreta pero la curiosidad era mayor, cuando escucho que no conocía el mar una idea vino a su mente.

-el mar es mi hogar, si mejoras te dare una vuelta encima de mi lomo
pero no te asustes de mi forma real-

Leviatán una Bestia marina del tamaño de una ballena que había tomado la forma de un humano por un hechizo de la bruja que ahora descansaba en paz, recordó ese detalla y mostro una mirada melancólica.

-no duermas- susurro a media voz pero segura alcanzaba a escuchar –no me gustaría quedar en silenció.

-al menos estando a mi lado no tendrás que huir- comento mostrando por primera vez una pequeña sonrisa.

Permitió que ella bajara de sus brazos aun temiendo por la herida de su tobillo pues al parecer Sora estaba preocupado por el bienestar de la chica, lo bueno era que faltaba muy poco para llegar.

-entiendo… entonces promete que no huiras luego de verme ¿si?-
Busco con la mirada el puerto donde se encontraba el barco y logro divisarlo a la lejanía, señalo con su mano derecha el sitio donde estaba la embarcación –mira ahí es-

Podía que Sora amara la soledad desde tiempos antes había sido una persona solitaria pero no podía negar que el hecho de tener compañía lo hacia sentir reconfortado o comodo.

Senti como me bajaba de sus brazos eso solo significaba que ya estabamos llegando, escucher su frase me hizo pensar que el queria protegerme asi que volvi a sentir ese tipico sonrrojo en mis mejillas. Deje por un momento de pensar en aquello y apoye mi pie sano en el suelo dejando al otro en el aire mientras me apoyaba de Sora para no perder el equilibrio-No huire lo prometo-dije mientras le dedicaba una sonrrisa calida, aun estaba agradecida por lo que habia hecho.

Voltee mi mirada hacia donde el me decia, me quede impacta al ver ese muelle, ademas de aquel azul intenso que me habia imaginado era mucho mejor que eso, parecia que nunca terminaba y que los barcos se perdian al horizonte... mis ojos brillaron de emocion a pesar que me quede sin palabras, era realmente hermoso, ya podia sentir ese olor extraño a sal... el olor a mar-es... simplemente hermoso y relajante-susurre olvidando por completo el dolor de mi tobillo.

Estaba en casa … aquel calido ambiente a la vez frescal solo hacia que el chico tuviera muchos deseos de correr por la arena y saltar al agua, perderse entre las olas y no regresar con ese mismo deseo de ser una criatura libre y no estar sometido a los mandatos de su padre adoptivo.

Observo fijamente a Aiko y no pudo evitar un leve rubor en las mejillas, amos parecían 2 chicuelos emocionados con la idea de ir al mar después de todo era un buen sitio para recrearse.

-te llevaría ahora mismo a nadar pero si lo hago temo que tu herida se infecte, ¿tu que opinas?-

Aun sabiendo que la mejor opción era llevarla directamente dentro del barco y terminar la curación el prefería saber la opinión de ella. a pesar que no era una persona buena socializando se estaba adaptando a la forma mas correcta de actuar.

Seguía observando como un pequeño niño la hermosura de paisaje azul con matices blancos de la espuma formada por el impacto de las olas, se contenía tratando de aparentar ser una persona seria y tranquila aunque en el fondo no aguantaba más.

-lo que dice es muy cierto, en todo caso en cuanto mas ante entremos mas temprano saldremos-

Tomo la mano de la chica apretujándola solo un poco para momento después subirla a sus brazos de la misma forma que lo había hecho antes, corrió por la arena pero antes de entrar a las agua la dejo en el suelo para que sintiera la agradable sensación de la arena tibia en sus pies aprovechando para sacarse las botas y remangarse el pantalón hasta las rodillas.

-que buena sensación ¿no crees?-

Tomo asiento en la arena y fijo su mirada carmesí en el basto cielo, dibujando con su dedo la palabra “libertad” como si su deseo fuera hacer cumplido con tan solo esa acción.

Saco su camiseta dejando al descubierto la parte superior de su cuerpo, ya estaba acostumbrado a tener que quitarse la ropa la mayoria del tiempo y verguenza no conocia esa sensacion, cuando tomaba la forma de su bestia su ropa terminaba hecha trozos y sabiendo que eso era inevitable prefirio seguir con su forma de Sora.

Camino hasta donde se encontraba Aiko y se quedo ahi parado al lado de ella como si fuese su escolta o algo parecido.

-¿sabes nadar cierto? de lo contrario tendre que cargarte en mi espalda-

Si la chica no sabia nadar eso era realmente un inconveniente ya que lo menos que se deseaba era pasar por un mal momento de seguro no se iba ahogar pero la desesperacion al verse envuelto en las olas no era nada agradable.

Escucho detalladamente las palabras de la chica sin embargo las acciones decian mas que mil palabras y por lo visto ella pensaba que era una molestia para Sora, al contrario su compañia era muy agradable.

Se inclino hacia ella de forma que pareciera como si estaba dispuesto a darle un beso solo que termino tomandola de la cintura y recargandola encima de su hombro como dirian sus compañero "la cargo como saco de cafe" puede que tomarla bruscamente no fue lo mejor pero era una persona practica.

-¡vamos!-

Grito con mucho entusiasmo continuando el camino hasta que las aguas heladas tocaran sus pienas, poco a poco sumergiendose en el cristalino mar hasta que llego un punto que el agua alcanzaba su pecho, resbalo a Aiko por su pecho y la sujeto en un abrazo.

-de este modo no habra peligro pero si estas incomoda solo dime-

No podia evitar mosntrar una risa en cada expresion que observaba de la linda chica, su rostro de susto le parecia muy comico pero nada que demostrara burla mas bien era alegria. El sentir el contacto entre sus cuerpos solo provocaba leve sonrrojos en las mejillas del chico a pesar que era inocente como un niño no se negaba el hecho que era un hombre.

-Claro que no la soltare-

La apretujo con mas fuerza tal vez asi se sentiria mas segura y el miedo no le impediria disfrutar del momento, con cada ola que venia hacia ellos, el se colocaba de espalda de esta forma el impacto no iba hacer tan fuerte para Aiko.

-en verdad que se siente bien estar en el agua-comento mientras sacudia su cabello escurriendo el agua que lo empapaba.

-no debes agradecer.. oh espera ¿has dicho gracias? entonces yo deberia decir ¿de nada?, no soy bueno con los modales-

Mordio su labio inferior mientras reia un poco mas, debia ser que se sintio un tonto al haber olvidado los modales que le fueron enseñados pero ya habia pasado mucho tiempo desde la muerte de quien habia sido como una madre desde esa vez habia perdido interes en los demas.

-sabes... Aiko me provocas una sensacion o sentimiento que no logro decifrar es.. es molesto no saber de que se trata-

Sus brazos fueron perdiendo fuerza y ya no la sujetaba con la misma fuerza de antes, este se habia distraido observado las olas que venian desde lejos.